Madrid posee una vibra de fiesta al caer la tarde y los fines de semana, de hacer algo de tapeo y tomar un trago con amigos. Todos conocemos los platos y tapas típicas de Madrid, pero ¿sabemos cuales son los licores autóctonos de Madrid? Sigue leyendo y lo descubriremos juntos.
Licor de madroño:
Como su nombre lo indica proviene del fruto del madroño, árbol insigne de Madrid. Lo puedes encontrar en la Pastelería El Madroño, se trata de una receta artesanal súper secreta. Aunque hay quienes se han aventurado ha intentar recrearla. Cabe destacar que el fruto del madroño tiene un muy alto contenido alcohólico. De hecho en la antigüedad los romanos lo llamaban “arbustus unedo” pues si comías mas de uno corrías el riesgo de embriagarte.
Anís de Chinchón:
Esta dulce bebida, ya sea azucada a o no, se prepara en base a un destilado de anís verde macerado con alcohol natural de origen agrícola. La industrialización de este típico licor comenzó en 1911. Cuando 300 cosechadores tomaron la decisión de formar juntos la Sociedad Cooperativa Alcoholera de Chichón, con la que se volvió una realidad la elaboración y distribución de este delicioso licor.
Vinos de Madrid:
Los vinos de Madrid poseen una entretenida historia, que demuestra que con esfuerzo todo es posible. Si bien esta denominación dio sus primeros pasos en 1982 no fue hasta finales de 1990 que se volvió realidad. Sin embargo, comenzaron a sentarse las bases para este fin en 1972 cuando comenzó a funcionar el Reglamento del Estatuto de la Vina, del Vino y los Alcoholes. El cual fue sin duda el comienzo para las denominaciones de origen española.
Después de muchas vueltas de tuerca se dieron dos pasos importantes en la regulación de los vinos de la ciudad. En 1984 se definio el nombre de “Denominacion Especifica de Madrid”. Para los licores producidos en la región y en el año 1990 “Denominacion de Origen”. Ahora la ciudad tiene en su haber variedades de Tempranillo, Syrah, Cabernet Sauvignon y Merlot entre otras.
Cervezas de Madrid:
La Cibeles, es la cerveza firmada por el maestro cervecero David Castro quien la elabora con materia prima 100% madrileña. Basándose en su más fuerte privilegio: el agua de Madrid. Luego de un análisis de mercado superficial pudo notar que había muy pocas cervezas artesanales en la ciudad y fue así como convirtió su afición en algo más grande.
Esta cerveza ha tenido gran aceptación comercializándose en muchos negocios, desde tiendas gourmet, restaurantes, pubs y tiendas especializadas. Es increíble el contraste de su alcance en comparación con su fábrica de apenas 500 metros cuadrados apodada “la micro” debido a su tamaño.
Entre las variedades de esta “cerveza para gatos” encontramos: la rubia con un sabor bastante ligero y refrescante. La morena que posee un gusto dulce con un toque de amargor. La castaña con espuma densa y delicioso sabor. Trigo con un toque de amargor y poco índice de alcohol. IPA con aromas cítricos y algunos toques florales.